Ciudad de México, 4 Sep., (Nación 14).- Parece que fue ayer cuando para platicar con alguien, tenías que llamar a su casa o su trabajo. Otras veces, lo mejor era pasar a saludarlo y esperar encontrarlo.
Después de poco más de una década, las redes sociales se han convertido en parte esencial de la vida de millones de personas en el mundo, es casi imposible encontrar a alguien que no las use.
Esto nos ha conducido a una nueva forma de sociedad, la sociedad digital. Misma que, como todo, tiene aspectos positivos y negativos.
Si bien, la era digital nos ha permitido agilizar la comunicación, ha dado paso a una serie de fenómenos sociales que se ha vuelto “normales” en nuestra vida cotidiana.
Correos electrónicos, mensajes de texto, redes sociales, aplicaciones para pedir comida, taxis, mapas, transacciones bancarias, ver películas y hasta para conseguir citas románticas, todo al alcance de un dispositivo móvil.
Todo pareciera ser color de rosa. El problema surge cuando cambiamos el mundo físico por el virtual, la realidad por la fantasía. Y sin darnos cuenta, terminamos atrapados dentro de una cárcel invisible llamada sociedad digital.
@jabonisimo