Ciudad de México, 21 de julio de 2020 (NACIÓN 14).- El 3 de diciembre de 2018, el avión modelo 787 Dreamliner que trasladó a Enrique Peña Nieto durante su administración, partió rumbo al Aeropuerto de Logística del Sur de California, en Estados Unidos para iniciar el proceso de venta de la aeronave, tal como el presidente Andrés Manuel López Obrador lo prometió en campaña.
El avión considerado de lujo, costó según palabras del propio presidente López Obrador, siete mil 500 millones de pesos. La aeronave fue adquirida por Felipe Calderón y fue estrenada por el expresidente Enrique Peña Nieto en 2016.
“Mientras la gente no tiene ni para lo más indispensable, los funcionarios se sentían reyes”, dijo el actual mandatario cuando anunció que el TP-01 (Transporte Presidencial 01), mejor conocido como el avión presidencial, abandonaría el país.
Antes de despegar al aeropuerto de California para recibir mantenimiento, Carlos Urzúa, en ese entonces secretario de Hacienda, fue el único integrante del Gabinete del gobierno de Andrés Manuel en subirse al avión para revisarlo antes de partir.
Agregó que el proceso de enajenación estaría acompañado por la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) con el fin de que la aeronave no sea rematada, sino que se parta del precio de avalúo para llevar un proceso transparente.
En enero de 2020, el director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Jorge Mendoza Sánchez compartió el status financiero de la aeronave: Costó 218 millones de dólares.
Dijo que al cierre del 2019 se había gastado ya en el pago de deuda, más intereses, mil 833 millones de pesos y todavía existía un remanente de pago -de 2020 a 2027- de dos mil 724 millones de pesos.
De acuerdo con el comandante de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), Manuel de Jesús Hernández González, el costo total por concepto de preservación de la aeronave en Victorville durante todo el 2019 fue de 13 millones de pesos, más 15 millones por mantenimiento.
La aeronave que abandonó el territorio mexicano hace año y medio por considerar que su interior faraónico ofendía a la sociedad mexicana puede transportar hasta a 80 pasajeros, cuenta con equipos satelitales de comunicación e internet y estaba previsto que el Estado lo conservara hasta el año 2040.
Además tiene un lujoso baño con detalles de marmolería y cuenta con una alcoba para el presidente.
Te compartimos algunas imágenes del interior del polémico avión presidencial que volverá a México esta semana.