México, 25 de junio de 2020 (NACIÓN 14).- La aparición de un nuevo video de violencia policial en Estados Unidos, en el que un joven hispano de 27 años muere durante su arresto en Tucson, Arizona, desató la alarma y la renuncia de los autores y el jefe policial, en momentos en que el país está sacudido por protestas antiracistas tras el crimen de afroamericano George Floyd, a manos de un policía blanco.
En el video, difundido por la policía en las últimas horas, pero que se remonta al 21 de abril, se ve a Carlos Ingram López, que es perseguido por agentes dentro de una casa, y luego de maniatarlo, lo mantienen con su rostro sobre el suelo durante 12 minutos.
El jefe de la policía de #Tucson, #Arizona, presentó su renuncia este miércoles, un día después de que se diera a conocer la muerte bajo custodia policial de un hombre latino, Carlos Ingram López, de 27 años, quien fue sometido boca abajo contra el suelo por casi 12 minutos. pic.twitter.com/xrahxtmjWz
— Atlantide (@Atlantide4world) June 25, 2020
Tal como en caso de Floyd, que desató una ola de protestas antiracistas no vistas en décadas en EUA, López grita durante minutos “no puedo respirar”, además de suplicar en repetidas ocasiones, en inglés y español, por agua.
Los tres agentes vinculados a la muerte de Lopez, identificados como Samuel Routledge, Ryan Starbuck y Jonathan Jackson, presentaron su renuncia el jueves pasado, mientras el jefe de la policía, Chris Magnus, hizo lo mismo ayer, luego que se conoció la filmación, reportó la cadena CNN.
La alcaldesa de Tucson, Regina Romero, primera latina en conducir una ciudad con alta población hispana, se manifestó “profundamente perturbada e indignada” y brindó sus condolencias a la familia de la víctima.
Magnus aseguró que los oficiales no usaron un estrangulamiento contra López, pero que sí violaron las pautas de entrenamiento al restringir a la víctima en una posición boca abajo, antes de que la víctima sufriera un paro cardíaco y muriera en el lugar.
El informe de la autopsia dijo que la causa de la muerte fue una combinación de restricción física y paro cardíaco que involucra intoxicación por cocaína.
Dos de los oficiales involucrados son blancos y uno es afroamericano, informó Lane Santa Cruz, miembro del Consejo de la Ciudad.
Sin embargo, este día, la alcaldesa Regina Romero emitió un comunicado diciendo que le gustaría mantener a Magnus como jefe de policía de Tucson.
Romero elogió al jefe por sus “cambios progresistas” en el departamento durante su mandato y dijo que esperaba trabajar con él mientras la ciudad aborda la reforma policial.
My statement below regarding Chief Magnus. pic.twitter.com/iHDicV6Ufd
— Regina Romero (@TucsonRomero) June 25, 2020
“En este momento, mi atención se centra en el hecho de que la vida de un compañero de Tucson, Carlos Adrián Ingram-López, se perdió innecesariamente. El anuncio abrupto del jefe en la conferencia de prensa de ayer no debería quitarle eso. Sigo extendiendo mis más sinceras condolencias a la familia de Carlos Adrián durante este momento increíblemente difícil para ellos. La mejor forma en que podemos honrar la memoria de Carlos Adrián es uniéndonos y tomando medidas inmediatas para construir una comunidad mejor y más justa.
Según el estatuto de la ciudad, es responsabilidad del administrador de la ciudad aceptar renuncias o despedir a los directores del departamento. Después de escuchar los comentarios de mis colegas sobre el Consejo, no creo que el Jefe deba renunciar.
El Jefe Magnus ha presentado cambios de pensamiento en las políticas, prácticas y capacitaciones de TPD, y ha construido relaciones sólidas con nuestra comunidad desde que se unió al Departamento en 2016. Ahora es el momento de trabajar juntos y reconstruir la confianza pública en nuestro departamento de policía aumentando la transparencia, garantizando la responsabilidad y reimaginando cómo brindamos seguridad a nuestra comunidad. Espero con interés trabajar con el Jefe Magnus para lograr estas reformas ”.