México, 20 de abril de 2021 (NACIÓN 14).- El día de hoy durante la conferencia de prensa mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador recibió la aplicación de la vacuna de AstraZeneca contra el nuevo Coronavirus con el fin de protegerse ante un nuevo posible contagio, así como para poner el ejemplo entre la población mexicana que aún duda si aplicarse o no la dosis que le corresponde y demostrar que el biológico es seguro y eficaz contra esta enfermedad.
Tal y como lo había anticipado la semana pasada, el presidente de México se sometió a la vacunación contra el virus SARS-CoV-2 en conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional, siendo vacunado por una enfermera miembro de las Fuerzas Armadas de México.
“No duele, pero además ayuda mucho, nos protege a todos y hago de nuevo un llamado a todos los adultos mayores para que todos nos vacunamos, no hay ningún riesgo. Para empezar, no duele la vacuna… no pasa nada absolutamente”, aseveró el presidente López Obrador tras recibir la vacuna contra la COVID-19.
López Obrador agregó que las personas adultas mayores que habían dudado en ponerse o no la vacuna contra el virus SARS-CoV-2, tendrán la oportunidad de ponerse la vacuna en los próximos días cuando se realicen las jornadas para la aplicación de la segunda dosis de los biológicos que son suministrados en el territorio nacional.
“Cuando lleguen de nuevo al municipio para aplicar la segunda dosis, pueden aprovechar para que se apliquen la vacuna y protegernos todos”, añadió.
El presidente de México informó que la segunda dosis que le corresponderá a él será aplicada en aproximadamente un mes y el acto también se llevará a cabo en Palacio Nacional pero sin presencia de los medios de información y que por el momento se iría a descansar unos minutos como lo recomiendan los trabajadores del sector salud después de la inoculación.
La aplicación del antígeno la realizó la teniente enfermera Melina Vega, quien le mostró al presidente de México un frasco con la dosis que le sería administrada así como la jeringa que se ocuparía para el proceso, para cerciorarse que ambos insumos médicos se encontraran en buen estado y cerrados.
Como es habitual durante la campaña de vacunación contra el nuevo Coronavirus que se realiza en México, al presidente se le realizaron diversas preguntas como si había presentado fiebre durante las últimas 24 horas, algún síntoma de COVID en las últimas 24 horas, alergias a medicamentos o transfusiones sanguíneas recientemente, a lo que el mandatario respondió que no a todas ellas.
Después de este procedimiento la teniente Vega procedió a esterilizar la zona del hombro izquierdo para poder aplicar la vacuna, previo a la inyección el presidente dijo sentirse tranquilo y al se cuestionado sobre su sentir aseguró estar con “la cabeza fría, corazón caliente”; para finalmente recibir la dosis contra el nuevo Coronavirus.
Después de la aplicación, la elemento del Ejército Mexicano le recordó al titular del Ejecutivo que después de esta aplicación puede presentar alguna reacción como inflamación, dolor en el sitio de la inyección o enrojecimiento hasta dolor de cabeza, cansancio, dolor articular, dolor muscular o fiebre por lo que le pidió que continuara bajo observación médica por lo menos por media hora para prevenir cualquier reacción al antígeno y finalmente le entregó su cartilla de vacunación en donde quedó el registro de la inoculación.
Previo a la inoculación a la que se sometió el presidente de México informó esta misma mañana que dicha acción también tiene como intención que los adultos mayores que no se han vacunado contra esta enfermedad, sigan su ejemplo y también se suministren la vacuna para que sean protegidos.
“Me voy a vacunar porque quiero hacer una convocatoria, un llamamiento a todos los adultos mayores, los que se están quedando sin aplicarse la vacuna por alguna precaución que tengan. Decirles que estamos nosotros seguros de que no hay ningún riesgo, ningún peligro, que no hay reacciones graves”, comentó el presidente previo a su vacunación.
A pesar de comentar la necesidad que se tiene entre la población mexicana de la aplicación de las vacunas para combatir el virus SARS-CoV-2, Obrador añadió que ésta no es obligatoria y las personas que no deseen ser vacunadas están en su derecho de no hacerlo, aseguró que “nada se hace por la fuerza, todo es por la razón y el derecho”.