Ciudad de México, 3 de octubre (NACIÓN 14).- La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM), Nashieli Ramírez, afirmó que no hay quejas interpuestas por funcionarios capitalinos que fueron enviados a formar parte del llamado “Cinturón de la Paz”.
“Hasta ahorita, no tenemos en la Comisión ninguna queja de personal del Gobierno de la Ciudad, porque atendieran a la marcha”, dijo respecto a los 12 mil funcionarios que acompañaron la marcha del 2 de octubre.
La ombudsperson señaló que hubo una confusión sobre el objetivo del “Cinturón de Paz” y reiteró que no se puso en riesgo a ninguna persona.
“Yo creo que se crearon una serie de confusiones, y ustedes lo vieron: el cinturón de seguridad no era un cinturón para confrontar o para contener o para hacer labor de seguridad, y así sucedió”, aseguró.
“Y cuando estuvieron las cosas un poco más críticas, en todo el trayecto de 5 de Mayo, ya no tuvimos cinturón de seguridad, tuvimos cinturón de seguridad desde el principio, hasta Bellas Artes, y después, aquí en el Zócalo, básicamente para no exponer a las personas a ningún riesgo por la incorporación de estos grupos”, agregó.
Sobre el saldo de la marcha, la titular de Derechos Humanos de la CDMX informó que participaron más de 10 mil personas, sin contar a lo que fue el llamado círculo de paz, la mayoría de los asistentes lo hicieron de forma pacífica.
Al cuestionarla sobre los grupos violentos, Nashieli Ramírez afirmó que hubo algunos grupos con ideas distintas que se infiltraron en la marcha, “se limitaron a pintas, algunos vidrios rotos, muy pocos, (…) Y sí: algunos grupos, que como ustedes detectaron también, traían petardos, algunas cosas de elaboración casera, que llamaron la atención, en torno a lo que no es el sentido de esta manifestación”.
Pese a éstos actos violentos, la ombudsperson capitalina indicó que no hubo detenidos y sólo 3 personas heridas.