*Presentan cargos contra exfuncionarios cercanos de García Luna por tráfico de cocaína
México, 30 de julio de 2020 (NACIÓN 14).- Un tribunal de Nueva York acusó este jueves a Genaro García Luna, brazo derecho del expresidente Felipe Calderón (2006-2012), de participación continua en una empresa criminal, mismo delito por el que “El Chapo” Guzmán fue condenado a cadena perpetua.
“Durante casi dos décadas, García Luna traicionó a los que había jurado proteger al aceptar sobornos de miembros del Cártel de Sinaloa para facilitar sus crímenes y potenciar su empresa criminal”, dijo Seth D. DuCharme, Fiscal Interino de los Estados Unidos para el Distrito Este de Nueva York.
Además, de acuerdo a un comunicado del Departamento de Justicia de Estados Unidos, el mismo juzgado imputó a dos excolaboradores de García Luna: Luis Cárdenas Palomino, y Ramón Eduardo Pequeño García, por cargos de conspiración de tráfico de cocaína.
Ambos exfuncionarios fueron señalados formalmente ante cortes estadounidenses por haber participado en la red de protección que el extitular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) Genaro García Luna operó para favorecer al Cártel de Sinaloa, de Joaquín Guzmán Loera.
“García Luna y sus co-conspiradores enfrentarán a la justicia por delitos que involucran la importación y distribución de cantidades masivas de drogas peligrosas a Estados Unidos”, anunció Seth DuCharme.
Según lo establecido en la acusación, de 2001 a 2012, mientras ocupaba puestos de alto rango en el gobierno mexicano, García Luna recibió millones de dólares en sobornos del Cartel de Sinaloa a cambio de proporcionar protección para su droga.
De 2001 a 2005, García Luna dirigió la Agencia Federal de Investigación, y de 2006 a 2012, se desempeñó como Secretario de Seguridad Pública, controlando a la Policía Federal (PF). Cárdenas Palomino y Pequeño García también oficiales mexicanos de alto nivel trabajaron bajo García Luna durante este tiempo. Cada uno recibió millones de dólares en sobornos del Cartel de Sinaloa.
Cárdenas Palomino fue considerado la mano derecha de García Luna y estuvo al frente de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI). El exfuncionario estuvo involucrado en el montaje efectuado en diciembre de 2005 para representar la captura de Florance Cassez.
En 2010, pasó a encabezar la División de Seguridad Regional de la Policía Federal.
Mientras que, Pequeño García encabezó la División Antidrogas de la Policía Federal entre 2009 y 2013, y posteriormente fue jefe de Inteligencia misma corporación, de la cual fue destituido tras la fuga de Joaquín ‘Chapo’ Guzmán, del penal del Altiplano en 2015.
A cambio del pago de sobornos, entre enero de 2001 y el presente, los acusados abusaron de sus cargos públicos al permitir que el Cártel de Sinaloa obtuviera un paso seguro para sus envíos de drogas, y al proporcionar información confidencial de las fuerzas del orden sobre investigaciones sobre el Cártel, e información sobre los carteles rivales de la droga, lo que facilitó la importación de múltiples cantidades de cocaína y otras drogas a Estados Unidos.
“Por ejemplo, entre 2002 y 2007, García Luna presuntamente ayudó a al menos seis envíos de cocaína por un total de más de 50 mil kilos de cocaína”, agregó el Departamento en el comunicado.
García Luna fue arrestado el 9 de diciembre de 2019 por agentes federales en Dallas, Texas, y actualmente está pendiente de juicio en el Distrito Este de Nueva York para enfrentar estos cargos. Cárdenas Palomino y Pequeño García son actualmente fugitivos.
Si es declarado culpable de continuar con el cargo de empresa criminal, García Luna enfrenta una sentencia mínima obligatoria de 20 años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
Si son declarados culpables de un cargo de conspiración de drogas, Cárdenas Palomino y Pequeño García enfrentan una sentencia mínima obligatoria de 10 años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
El comunicado oficial del Departamento de Justicia se puede leer completo aquí