México, 15 de enero de 2021 (NACIÓN 14).- El gobierno de Estados Unidos compartió que la investigación en contra del general Salvador Cienfuegos Zepeda, podría reactivarse en ese país, luego de que la Fiscalía General de la República (FGR) anunció que no encontró elementos para ejercer acción penal en su contra.
A través de un comunicado de una frase, el Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció que se “reserva el derecho” de procesar al general Salvador Cienfuegos.
“Estados Unidos se reserva el derecho a reiniciar el enjuiciamiento de Cienfuegos si el Gobierno de México no lo hace”, aseguró el Departamento de Justicia de EUA en reacción a la decisión de las autoridades mexicanas.
El pasado jueves, la Fiscalía General de la República informó que luego del análisis correspondiente de los elementos de prueba presentados por la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos de América (DEA), no se encontró ningún valor probatorio para iniciar un juicio contra el general Cienfuegos.
Cabe recordar que, el militar mexicano que dirigió el Ejército durante el sexenio de Enrique Peña Nieto fue detenido el pasado 15 de octubre en el aeropuerto de Los Ángeles, California por elementos de la DEA.
El arresto del General de División sorprendió a las propias autoridades mexicanas que acusaron la falta de cooperación y el incumplimiento de los tratados de seguridad entre ambos países. Incluso la cancillería manifestó a Estados Unidos primero de forma hablada y luego por escrito, su profundo descontento por no haber informado que existía una investigación y una orden de aprehensión en contra del alto exfuncionario.
Salvador Cienfuegos fue acusado de conspiración para fabricar, importar y distribuir narcóticos en los Estados Unidos y de lavado de dinero.
Dichas acusaciones fueron retiradas por parte del Departamento de Justicia en un hecho insólito supuestamente para corregir el proceso y permitir que las autoridades mexicanas comenzarán su investigación.
Así, el 18 de noviembre del 2020, el general Cienfuegos fue entregado por las autoridades norteamericanas al Ministerio Público Federal mexicano.
Para esto, la justicia estadounidense entregó a la Fiscalía General de México encabezada por el fiscal Alejandro Gertz Manero, las pruebas en su poder que sustentaban los cargos penales estadounidenses contra el Secretario Cienfuegos.
“A solicitud de la Fiscalía General de la República, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, en virtud del Tratado que rige el intercambio de pruebas, ha proporcionado a México pruebas en este caso y se compromete a continuar la cooperación, dentro de ese marco, para apoyar la investigación de Autoridades mexicanas”, publicó el Departamento de Justicia el pasado 17 de noviembre, un día previo al regreso del militar mexicano a su país.
Sin embargo, este día, el canciller Marcelo Ebrard dijo durante la conferencia matutina del presidente López Obrador, que de parte de la DEA únicamente se recibieron copias fotostáticas de las carátulas de celulares con llamadas e intercambios de mensajes, lo cual no demostraba la participación del general Cienfuegos.
“Entonces, la Fiscalía General de la República informa al gobierno de la República y al pueblo de México que la conclusión de lo que hizo, sus investigaciones, los elementos que proporcionó la defensa, pero sobre todo lo que proporcionó Estados Unidos, no hay manera de vincular a proceso al general Cienfuegos; es más, en México ni siquiera lo habrían podido detener, de acuerdo a ley vigente”, concluyó el canciller quien añadió que se hará público el expediente que recibieron de la DEA.
Cabe destacar que la propia Fiscalía, detalló que desde el año 2013, durante la administración gubernamental pasada en México, la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos de América (DEA), inició sin el conocimiento y sin la colaboración de dicha administración mexicana, una investigación de delitos contra la salud, en donde se involucraba al entonces Secretario de la Defensa Nacional, General de División Salvador Cienfuegos Zepeda.
Esa investigación la continuó ese organismo que combate a las drogas en el gobierno norteamericano, durante la presente administración.