Ciudad de México, 8 de noviembre (NACIÓN 14).- El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la recién elegida presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra no será incondicional de nadie y la describió como una mujer con convicciones.
En su conferencia a medios, el mandatario explicó que los senadores que votaron por ella, se fijaron en que se trata de una mujer vinculada a la defensa de los derechos humanos y que ha sufrido en carne propia lo que es la desaparición de un familiar.
Cuestionado sobre la militancia en Morena de la nueva ombudsperson, que ha sido criticada por la oposición, al considerar que existe una cercanía con el gobierno federal, recalcó “No queremos nosotros tener achichincles, no queremos tener funcionarios serviles; queremos servidores públicos con integridad, con principios, honestos, que ejerzan su libertad, verdaderamente independiente”.
Agregó que sus principios morales le impedirían pedir a una autoridad que se ocultará una violación de derechos humanos y dijo “No queremos incondicionales en nada, lo que queremos es que haya justicia y que se proteja a los derechos humanos, y que no haya corrupción”.
Dijo que antes el papel de la CNDH era cómplice y cumplía con el trámite de enviar las recomendaciones y ya.
Aseguró que se acabó con la simulación en ese organismo y que se profundizará en las investigaciones y reconoció que una luchadora social llegué a dirigir la CNDH.
Durante la conferencia, se compartió con el presidente el registro de actos de corrupción cometidos por defensores de derechos humanos, como el caso del hijo del periodista Carlos Domínguez, quien tuvo que abandonar Tamaulipas luego de recibir amenazas por parte del presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, Raymundo Ramos, quien presuntamente recibe dinero por parte del grupo criminal Los Zetas.
El presidente dijo que el régimen neoliberal heredó del Porfiriato el arte de la simulación, “Porfirio Díaz era el maestro de la simulación y eso continuó y eso tiene que desaparecer”.
Aseguró que por eso ahora se buscan que los representantes de DDHH, sean gente honesta, íntegra y capaz de presentar su renuncia en caso necesario.
Dijo que hasta diciembre del año pasado, se respetaban las leyes en la forma y se violaban en el fondo, “Maiceaban al gallo y dejaba de cantar el gallo”.