El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador visitó la tumba de sus padres Andrés López y Manuelita Obrador, así como la de su difunta esposa, Rocío Beltrán Medina, y lo hizo acompañado de su hijo menor, Jesús Ernesto.
El mandatario de la nación llegó procedente de la Ciudad de México a su estado natal alrededor de las 5:30 de la tarde en un vuelo comercial, y luego de recibir algunas peticiones de ciudadanos que lo esperaban a las afueras del aeropuerto se dirigió al Panteón Central de la ciudad de Villahermosa, Tabasco, donde ingresó solo con su hijo más pequeño y una reducida comitiva que lo cuidaba.
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Ahí solo colocó un ramo de flores, se paró varios minutos y antes de retirarse pidió a los tabasqueños no olvidar a “nuestros difuntos que son nuestras raíces”, comentó.
Rocío Beltrán nació en agosto de 1956 en Tabasco y fue esposa de López Obrador por casi 24 años, con quien tuvo tres hijos: José Ramón, Andrés Manuel y Gonzalo.
La esposa del entonces jefe capitalino del desaparecido Distrito Federal (DF) murió a los 46 años el 12 de enero de 2003, tras varios años de lucha contra un padecimiento del sistema inmunológico.
VÍA: Fama Pública
