Ciudad de México, 3 Sep (Nación14).- El Mieloma Múltiple y del Linfoma de Hodgkin son cánceres hematológicos poco frecuentes y generalmente son diagnosticados en estados tardíos o avanzados por ello la importancia de incrementar el conocimiento sobre sus causas y a las primeras señales visitar al especialista para una valoración.
En el marco de las conmemoraciones de los días mundiales del Mieloma Múltiple y del Linfoma de Hodgkin, el 5 y 15 de septiembre, respectivamente, especialistas buscan concientizar y destacar la necesidad de conocimientos sobre estos padecimientos para una detección oportuna, consideró la directora médica de la biofarmacéutica Takeda México, Yusimit Ledesma.
Abundó que debido a su rareza, hasta el momento no están claros los regímenes para el tratamiento en pacientes con estados avanzados y las soluciones de primera línea, van desde quimioterapias, trasplantes o hasta anticuerpos que han demostrado eficacia, reducción de toxicidades y supervivencia de 70 por ciento y a través del hashtag #GreaterThanCancer buscan concientizar a través de redes sociales la detección oportuna de estos padecimientos.
En México, la Secretaría de Salud registró en 2016, más de mil 057 casos de Linfoma de Hodgkin, el cual inicia en los ganglios linfáticos y en etapas avanzadas invade el torrente sanguíneo hacia el hígado, pulmones y médula ósea.
De acuerdo a datos de la Sociedad de Leucemia y Linfoma, este cáncer, afecta comúnmente a jóvenes de 20 años y mayores de 60, así como en se manifiesta en personas con sistema inmunológico débil o con antecedentes familiares.
Estudios indican que hasta 30 por ciento de los pacientes con Linfoma de Hodgkin recién diagnosticados, progresan positivamente después del tratamiento de primera línea y la tasa de supervivencia a 5 años es del 90 por ciento en etapas tempranas, en estado avanzado disminuye a 70 por ciento.
En el caso del Mieloma Múltiple, es el segundo tipo de cáncer hematológico más común, representa uno por ciento de todos los cánceres a nivel global, se produce en la médula ósea y llega afectar los huesos, el cráneo, pelvis y la columna vertebral y es considerada como una enfermedad que no tiene cura y no existe una terapia única para tratarlo por lo que se diseña un plan personalizado de acuerdo a la edad, salud general, pruebas de sangre, médula ósea y otros.
En 2018, The Global Cancer Observatory, reportó 376 mil casos en el mundo con esta condición y algunos de los síntomas silenciosos y característicos del padecimiento son cansancio, mareos, fracturas sin causa aparente, pérdida de apetito entre otros.
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