México, 15 de junio de 2020 (NACIÓN 14).- Pekín redoblaba esfuerzos este lunes para intentar contener un rebrote de COVID-19 en algunos barrios de la ciudad, donde fueron constatados 79 nuevos casos vinculados a un mercado gigante, lo que obligó a decretar nuevos confinamientos en áreas residenciales y realizar pruebas suplementarias.
El nuevo coronavirus parecía casi erradicado en China, donde había emergido a finales de 2019 en Wuhan (centro). Sin embargo, un nuevo brote fue detectado la semana pasada en la capital.
De acuerdo con AFP, se restablecieron los controles de temperatura que habían dejado de realizarse en los ingresos a las áreas residenciales y edificios de oficinas. En tanto los sitios culturales y deportivos serán nuevamente cerrados.
La parte continental de China reportó el domingo 49 nuevos casos confirmados de la neumonía COVID-19, de los cuales 39 son de transmisión local y 10 proceden del extranjero, informó hoy lunes la autoridad sanitaria del país.
Entre éstos, 36 están vinculados al mercado mayorista de Xinfadi, en el sur de Pekín, lo que alimenta temores sobre una segunda oleada epidémica. Este mercado aprovisiona a gran parte de la capital.
Con un tamaño de 1.120.000 metros cuadrados (el equivalente de alrededor de 155 campos de fútbol), el mercado representa aproximadamente el 80 por ciento del suministro total de productos agrícolas de la monumental ciudad. A diario se comercializan 18 mil toneladas de vegetales y 20 mil de frutas.
Un alto funcionario del barrio de Haidian informó sobre la detección de más personas infectadas en Yuquandong, otro mercado mayorista del noroeste de la capital.
Las autoridades decretaron el cierre de los puntos de venta y escuelas aledañas, así como ordenaron el confinamiento en 10 zonas residenciales cercanas, prohibiendo salir a sus habitantes.
No obstante, pueden recibir paquetes llevados por repartidores a las puertas de acceso.
Entre las personas que tuvieron contacto cercano con infectados vinculados al mercado de Yuquandong, algunos fueron automáticamente puestos bajo cuarentena. Otros tendrán que llevar consigo “termómetros inteligentes” permanentemente para poder controlar su temperatura a distancia.
En China, actualmente hay 177 personas con COVID-19, dos en estado grave. Se trata del nivel más elevado desde comienzos de mayo, y no se han señalado muertes desde hace un mes.



