Gerardo Fernández Noroña vivió un momento incómodo en el Senado: convocó a una conferencia de prensa para responder a las críticas que generó su declaración sobre Grecia Quiroz a quien calificó de asumir una postura “de ultraderecha fascista”, pero ningún medio asistió.
El legislador morenista habló frente a un salón repleto de sillas vacías, donde afirmó que enfrenta una campaña “insidiosa” y “de mala fe”.
El senador negó haber emitido comentarios misóginos, insistiendo en que su señalamiento hacia Quiroz fue estrictamente político y ligado a la disputa en Michoacán.
Sostuvo que quienes lo acusan son los mismos que han atacado a Fátima Bosch y que guardaron silencio ante el reciente caso de acoso contra la presidenta Claudia Sheinbaum en el Centro Histórico.
Molesto por la ausencia de la prensa, Noroña reprochó que los medios no escucharan su versión, pese a que dijosí buscaron a diversas senadoras para cuestionarlo.
Afirmó que cuenta con sus propias transmisiones para responder, pero quiso hacerlo “institucionalmente”, aunque la respuesta, lamentó, fue un vacío total.



