Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, dijo que su Gobierno está enterado de la carta donde supuestamente los hijos de Joaquín Chapo Guzmán , también conocidos como Los Chapitos, niegan encabezar dicha fracción del Cártel de Sinaloa.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador dejó en claro que su Gobierno no protege a ningún delincuente y que persigue a todos los criminales por igual.
“Supimos hoy de esa carta, no conozco el contenido, nosotros sobre eso actuamos de conformidad al marco legal y no especulamos”, dijo.
“A diferencia de lo que sucedía antes, no hay ningún grupo protegido, porque antes como ha quedado de manifiesto, se protegía a un grupo, a un cártel y se perseguía. otros, incluso hasta los del cártel protegido actuaban como policías para combatir a los adversarios, eso no, aquí está bien pintada la raya, lo hemos dicho desde siempre, hay una frontera, autoridad y delincuencia, y es parejo”, refirió.
“Eso es lo que puedo comentar: no se protege a nadie y se persigue a todos los que cometen ilícitos, no hay impunidad”, puntualizó.
Los Chapitos hicieron llegar al noticiero de Azucena Uresti una carta en la que se desligan de cualquier actividad delictiva y, por lo tanto, del mando del Cártel de Sinaloa.
En la misiva difundida el miércoles, pidieron investigar bien los hechos y argumentaron que la información sobre ellos es “falaz”, que solo los perjudica y sirve para lucrar en su nombre y en el de su padre.
Aunque Washington acusó en abril al Cártel de Sinaloa de liderar “la mayor y más prolífica operación de tráfico de fentanilo del mundo”, los hijos de Guzmán Loera lo negaron.
“Nunca hemos trabajado con fentanilo. Sin embargo, en Sinaloa sí abundan quienes lo trabajan”, enfatizaron.
Entre otras cosas, también afirmaron que existen bandas criminales que negocian bajo sus nombres, pues la marca de Los Chapitos o El Chapo se “ha vuelto muy poderosa”.
El Gobierno de Estados Unidos anunció en abril pasadomúltiples cargos por narcotráfico contra los hijos del caopo criminal Joaquín Guzmán Loera.
Las acusaciones se encuentran en diferentes estados y tienen como objetivo atentar contra “la operación de tráfico de fentanilo más grande, violenta y prolífica del mundo, dirigida por el Cártel de Sinaloa”.
El Departamento de Justicia anunció cargos abiertos contra Iván Archivaldo Guzmán Salazar, alias Luis, Chapito o Tocayo; contra Jesús Alfredo Guzmán Salazar, Alfredillo; Joaquín Guzmán López, alias El Güero, Güero Moreno o Moreno; y Ovidio Guzmán López, alias El Ratón o Ratón Nuevo.
El Distrito Sur de Nueva York tiene cargos por tráfico de fentanilo, armas y lavado de dinero contra Iván, Alfredo y Ovidio Guzmán.
Se les señala de controlar operaciones extensas, multifacéticas e internacionales que cubrían el comercio de fentanilo.
El Departamento de Justicia apunta que presuntamente usaron aviones de carga, aeronaves privadas, submarinos y otras embarcaciones sumergibles y semisumergibles, portacontenedores, embarcaciones de suministro y pesqueras, lanchas rápidas, autobuses y vagones de ferrocarril, entre otros, para transportar sus drogas y precursores químicos.
El Distrito Norte de Illionis acusa a los cuatro Chapitos de cargos de narcóticos, lavado de dinero y armas de fuego.
Con información de López-Dóriga Digital
