Tras la llegada del tercer Embraer E195-E2 de Mexicana, la Aerolínea del Pueblo con matrícula MXC, tuvimos la oportunidad de platicar con el capitán, Juan Javier López Mejía, quien fue uno de los experimentados pilotos que voló desde Brasil hasta el AIFA esta moderna aeronave que se suma a los MXA y MXB entregados en semanas posteriores.
“Es una gran experiencia”, nos contó el capitán López Mejía tras pasar casi siete horas volando la moderna aeronave desde Manaus, en lo profundo de la selva amazónica brasileña, tiempo en el que pudo poner a prueba las innovaciones tecnológicas con las que cuenta la nave y que la hacen más rentable para la industria aérea, aseguró.
“Son varias ventajas las que ofrece, la primera es un confort, tenemos también equipos de navegación que nos ofrecen evaluar a gran distancia cómo va a estar el clima, cómo va a estar la turbulencia, los sistemas de navegación disponibles, ver cómo está el terreno (…) establecer comunicación por diferente frecuencia por diferentes vías, comunicación satelital para generar información de cómo va a estar la pista, el clima a la llegada y también tenemos una eficiencia en el consumo de combustible, eso representa un ahorro para la empresa pero también reduce la huella de carbono que es uno de los objetivos de la empresa, de los fabricantes y también es un compromiso como país”, aseguró el capital López Mejía.
Con casi 5 mil horas de vuelo y en base a su experiencia en el sector aéreo, el capitán destacó la seguridad que proporciona la tecnología incluida en el moderno Embraer E195-E2, misma que lo convierten en la aeronave más segura de su categoría y que se suma a toda la gama de comodidades que incluye el fabricante, como la reducción del ruido en cabina, entre otras.
Además del capital López, también pudimos conversar brevemente con el también capitán y comandante de vuelo, César Rivera, quien calificó de “súper bien” su experiencia tras pilotar la aeronave por casi siete horas desde Brasil, y nos aseguró que esta fabricante ofrece a los pasajeros algo que en la industria aérea comercial y convencional es cada vez más escasa: el espacio entre piernas.