*Niños envían cartas a los Reyes Magos a la antigüita conscientes de que los globos dañan el medio ambiente
Ciudad de México, 4 de enero (NACIÓN 14).- Aquellos que dicen que la correspondencia está muriendo, deben estar asombrados de las filas tan largas que durante estos dos días seguidos se han observado incluso hacia el exterior del emblemático edificio de Correos de México, formadas por miles de niños que asisten con la ilusión de enviar su carta a los Reyes Magos.
Este edificio ubicado en la calle de Tacuba y que es considerado uno de los más importantes del país, acogió este fin a miles de niños que desde el viernes están apurándose a dejar sus peticiones en el buzón para que sean recibidas a tiempo por Melchor, Gaspar y Baltasar.
Desde las 10:00 de la mañana y hasta las 15:00 horas, este sábado el Palacio Postal mantuvo sus puertas abiertas, sin embargo debido a la gran afluencia se está considerando ampliar el horario del domingo unas horas más.
La dinámica dentro del recinto consiste en adquirir el kit navideño en las ventanillas, aprovechar para tomarse la foto en el árbol navideño que adorna las imponentes escalinatas de herrería color dorado, redactar la carta en el área que se acondicionó con mesitas y bancas para que los niños escriban sus peticiones y finalmente las depositen en los buzones que fueron colocados en el recinto.
Asimismo, los niños pueden tomarse fotografías familiares en diferentes escenarios navideños que se colocaron para este momento.
Los padres pueden adquirir por siete pesos el timbre postal navideño que en ocasión fue diseñado con la imagen de una flor nochebuena, y si uno desea también la hoja para redactar la carta y el sobre, el precio total es de 9.50 pesos por el kit.
Los niños que no alcanzaron lugar en las banquitas encontraron espacio en los primeros escalones de mármol que adornan el palacio para redactar su carta, cuidadosos de redactar bien su nombre, calle, alcaldía y código postal, para que no se equivoquen de casa los Reyes Magos.
El total de visitantes seguramente superará los cien mil del año pasado debido a que muchas familias optaron por primera vez por la correspondencia en lugar de los globos, luego de que la Secretaría del Medio Ambiente realizará la petición de no utilizar este medio para enviar las cartas.
El año pasado el Palacio Postal recibió alrededor de 30 mil cartas y en esta ocasión seguramente se superará la cifra porque aún no eran las tres de la tarde y ya se habían terminado los sobres.
Los padres de familia que no iban a permitir que la ilusión de sus hijos terminará por la falta de sobres, salieron a comprar el material necesario afuera del edificio.
Y es que en la entrada ya se podía apreciar a unas cuantas personas en la banqueta vendiendo hojas blancas chicas, grandes, hojas adornadas, plumas, crayones y sobres.
Los sobres afuera del recinto se vendieron en un precio de 8 pesos, la carta chica 3 pesos y si el espacio no era suficiente para enlistar todos los deseos, se tenía que comprar la carta grande por 5 pesos.
Los familiares entrevistados comentaron que en promedio los Reyes Magos gastarían este año entre tres mil y cinco mil pesos en regalos para los niños.
Por ejemplo, María del Socorro Serrano quien venía de la colonia Granjas México llevó a sus nietos a Correos de México para conservar la tradición cuando hace años ella traía a sus hijos a dejar sus misivas a los reyes.
La niña Fernanda consideró que se portó regular en todo el año pero confió en que los Reyes le traigan algo de la lista que llevaba, entre sus deseos estaban una tablet, la camper de Barbie y unos audífonos.
Miriam que venía desde Naucalpan viajó en transporte público con sus dos hijos para traerlos a depositar su carta en los buzones del Palacio Postal.
Aseguró que optó por la correspondencia para hacer consciente a sus hijos del daño que hace al medio ambiente enviar las cartas en globo a los Reyes.
“Este año no la pueden enviar en globo por la contaminación, y vinimos para hacerlos conscientes de que no más plásticos en el ambiente”, comentó.
Para ella esta fue la primera vez que asistió a dejar las cartas de los niños al edificio de Tacuba y opinó que aunque la organización fue buena, asistió mucha gente y temía no alcanzar su kit navideño y entregar las cartas a tiempo porque ya se acercaba la hora del cierre del servicio.
Su hijo José dejó de lado los juguetes y pidió a los Reyes Magos por la salud de la esposa de su profesor. Su hermano Joel pidió juguetes para los dos, un monopoly, pistas de hot wheels y un drone. Los dos consideraron que se portaron bien en el año.
José Luis viajó en metro desde Coapa para adquirir su kit navideño y consideró que la correspondencia es una buena alternativa para evitar el impacto al medio ambiente, confesó que aunque la petición de no enviar la cartita a través de globos se ha hecho en años pasados, los ciudadanos no habían acatado esa medida. Cuando se le preguntó cuánto cree que gastarán este año los Reyes Magos para los regalos, contestó que “mínimo unos tres mil pesos”.
César se desplazó de Nezahualcóyotl con su familia por primera vez a Correos de México y se mostró muy sorprendido por la afluencia de gente. Compró su timbre y sus hojas en las ventanillas del recinto y comentó que aunque la situación económica está un poco limitada en este momento, los Reyes Magos ya debieron contemplar este gasto desde meses atrás. Calculó que los Reyes Magos en su hogar, deberán desembolsar alrededor de seis mil pesos para los regalos de dos niños.
Desde la alcaldía Tláhuac, Carlos Granados trajo a su familia por primera vez y dijo que para sus tres nietas los Reyes Magos tendrán que gastar aproximadamente como ocho mil pesos.
Las nietas ya no alcanzaron sobres en las ventanillas pero el abuelo los consiguió afuera, en sus cartas pidieron bicicletas, teléfonos, el álbum de los Polinesios y muñecas de las princesas de Disney. Su nieta mayor pidió a los Reyes Magos suerte y sabiduría para su examen de Educación Media Superior.
Don Carlos opinó que esta de acuerdo en que el Palacio presté sus instalaciones para continuar con esta tradición porque ver la ilusión de los niños al traer su carta, no tiene precio.
Aseguró que antes fomentaba la idea de enviar la carta con globos pero una vez que hizo consciencia del daño “soy mejor partidario de esto o de poner la carta como se usaba antes en el zapato”.
Sin duda en estas fechas decembrinas el correo se sintió más vivo que nunca y en una ocasión tan tradicional como esta de enviar la carta a los Reyes Magos, es impensable que pueda desaparecer. Feliz día de Reyes a todos.